Erica
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Sobre Mí: Soy mamá de tres hermosos soles, dos niñas y un varón. Ellos forman parte de mi sueño hecho realidad. Ellos me hacen emocionar desde lo más profundo con una sola mirada, un dibujo, un beso lanzado al aire para ser atrapado, con su suave respirar en el silencio de la noche… Sé que el trabajo de una madre es incondicional e incansable, y que nunca se termina. Sé que me falta muchísimo por recorrer y descubrir. Y mi anhelo será siempre verlos crecer Felices
TIPS PARA LOGRAR UNA EXITOSA LACTANCIA MATERNA
Si bien amamantar es un acto natural e instintivo, no todas las mujeres logramos que nuestro bebé «se prenda» bien de entrada, y esto muchas veces puede llevar a una frustración por parte de la madre que hace que abandone los intentos por lograr una lactancia natural.
Cuando tuve mi primera hija en el mismo Sanatorio me entregaron una especie de «instructivo» que me ayudó mucho como madre primeriza para lograr una lactancia exitosa. Recuerdo que las primeras 72 horas con mi bebé fueron difíciles para lograr que se alimentara, y me entristecía mucho pensar en no poder darle pecho así que insistí e insistí hasta lograrlo.
Quiero compartir con ustedes algunos de los consejos que allí tengo escritos, porque el acto de Amamantar es un aprendizaje tanto para la mamá como para el bebé.
Lo que sigue forma parte de este cuadernillo, por lo que no es de mi autoría, espero les sea de utilidad:
«LA PRIMERA LECHE O CALOSTRO
Los primeros días después del nacimiento, la mujer produce calostro, una leche amarillenta de gran valor nutritivo y antiinfeccioso. Al principio el calostro no es abundante pero es todo lo que el bebé necesita. Alrededor del tercer día, e incluso más adelante, tiene lugar la bajada de la leche. Los pechos están mas tensos y la leche es mas abundante.
POSICIONES PARA AMAMANTAR
La mamá elegirá la que le parezca más adecuada y la que le permita una mayor relajación. Es aconsejable alternar las posiciones ya que esto ayuda a prevenir las grietas del pezón y también a vaciar mejor los conductos y colectores de todo el pecho.
Recostada: de lado con el bebé enfrentado al pcho bien cerca suyo.
Sentada: es mejor que la mamá utilice una silla con apoya brazos y almohadones para estar más cómoda.
Inversa: se logra colocando las piernas del bebé hacia la espalda de la mamá. Esta posición es recomendable cuando el niño tiene dificultades para mamar de un lado y no del otro.
DETALLES A TENER EN CUENTA
Para el buen desarrollo de la lactancia:
– El bebé debe tener su panza apoyada contra el cuerpo de su mamá. Es muy importante que esté cómodo y bien sujeto.
– Sostener al bebé con un brazo y con la mano libre el pecho, con el pulgar por encima de la aréola y los otros dedos por debajo.
– La boca del niño debe estar bien abierta, sus labios evertidos, abarcando la mayor parte de la aréola. Esto permite una succión eficaz, mayor remoción de leche y evita que se lastime el pezón.
PEZONES DOLORIDOS
Debido a que los conductos que atraviesan el pezón están secos y a que el niño provoca vacío en las primeras succiones, éstas suelen ser dolorosas. Las molestias y el dolor pueden prevenirse extrayendo unas gotas de leche antes de amamantar. Además puede ser de utilidad:
– Alimentar al bebé con más frecuencia, para que comience a mamar antes de sentir mucha hambre;
– Verificar la posición del bebé respecto del cuerpo de la madre. Los vientres deben estar bien juntos y la boca enfrentada al pecho;
– Es conveniente esparcir sobre el pezón una gota de leche luego de cada toma y dejar que se seque al aire;
– Si es posible exponer los pechos al sol directo dos o tres veces al día durande cinco y diez minutos.
TENSIÓN LÁCTEA
Apartir del tercer día posterior al nacimiento, la mamá puede experimentar una congestión del pecho que dura dos o tres días; puede traerle malestar, dolor y hasta un poco de fiebre. Esto coincide con la bajada de la leche, cuando se pueden sentir los pechos tensos, calientes, doloridos. Una vez pasada la congestión, el pecho volverá a estar blando. Esto no significa que se haya retirado la leche.
Es aconsejable:
-Antes de cada toma: Aplicar calor local colocando toallas húmedas en el pecho, correr el agua de la ducha o usar bolsa de agua caliente; Masajear los pechos en dirección opuesta, si es que están muy duros; Extraer unas gotas de leche con el fin de ablandar la aréola, ya que cuando el pecho está muy tenso, el bbé tiene dificultad para prenderse bien.
– Durante la toma: Masajear circularmente las zonas que se perciban más duras; Extraer leche en forma manual si el bebé terminó y aún los pechos tienen durezas.
POR ÚLTIMO:
El bebé debe ser alimentado cada vez que tiene hambre, a libre demanda. Al principio los intervalos entre las mamadas pueden ser sumamente irregulares. Se irá adquiriendo un ritmo más regular a medida que vaya creciendo.
En cada mamada se debe alternar el pecho que se le ofrece primero al bebé. Se le debe permitir al bebé succionar tranquilamente sin controlar el tiempo.
La estrecha relación iniciada durante el embarazo entre la madre y el bebé, se continúa durante el amamantamiento. La leche materna, además de brindar protección al recién nacido contra ciertas infecciones, es el alimento ideal pues contiene la cantidad de proteínas, grasas, hidratos de carbono, vitaminas y minerales para crecer adecuadamente.»
Como dije antes, no siempre es fácil el inicio de la lactancia materna y más aún para una madre primeriza. La perseverancia, la calma, la seguridad y la tranquilidad de la mamá son claves para lograrlo. Con mi primera hija tuve que superar algunas dificultades para lograr la lactancia, pero no me dejé vencer y lo logré. Con Paciencia y con Amor.